Este año se han cumplido cien años de la muerte de Emilia Pardo Bazán, una de las escritoras más reconocidas de nuestro país. Cultivo varios géneros, desde hasta la narrativa, tanto en forma de novelas como de cuentos, hasta el ensayo y el teatro, y fue una de la introductoras de la corriente del naturalismo en España. No solo fue una gran escritora, también fue una gran luchadora por la igualdad, una feminista que defendió los derechos de la mujer y que denunció en sus obras la violencia machista.
Ha sido precisamente uno de sus relatos (de los que escribió más de 500, aunque el número exacto se desconoce), La resucitada, la última propuesta de Lecturas junto al fuego (aprovecho, antes de seguir, para dar las gracias a todos los que os habéis animado a leerlo a lo largo de estos dos meses, y a todos lo que me habéis acompañado en la lectura conjunta en septiembre), con lo que este blog ha querido conmemorar el centenario de la muerte de esta escritora.
La resucitada es un cuento de aire gótico y muy muy breve, se lee en diez minutos, así que en esta ocasión yo seré también muy breve: porque lo bueno, si breve, dos veces bueno.

El relato narra el regreso de la tumba de Dorotea de Guevara, una mujer que, tras haber sido dada por muerta, recobra la conciencia tendida en el ataúd, aunque antes de ser enterrada. Tras despertar, decide volver a casa con su familia.
El inicio es ya impactante, pero a partir de ahí el relato adquiere una sensibilidad exquisita y trasmite con viveza ―a pesar de su brevedad― la desesperación de Dorotea, la aflicción de su alma al sentir cómo la evitan sus allegados, quienes no la aceptan de nuevo: la tristeza y la soledad son intensas y vivas.
Queda bastante claro, en mi opinión, que la autora juega con el tema del entierro prematuro, si bien entiendo la afirmación de la escritora Nieves Abarca en el periódico La voz de Galicia, de que este sea quizá el primer cuento de zombis en España, ya que la autora deja abierta una pequeña rendija a una interpretación más sobrenatural.
Este relato, que recuerda a algunos de Poe (especialmente a Ligeia), es una metáfora del destierro social con el que se castiga a aquel (o aquella, especialmente aquella) que tiene la osadía de hacer lo que la sociedad no admite, lo que la sociedad censura: Dorotea vuelve de la tumba, es un ser abominable, no sigue las reglas de la sociedad, es un elemento perturbador que vulnera las leyes de los hombres y de lo que estos han dado en llamar natural; se convierte así en un algo aterrador, una mujer díscola e insumisa; y, sí, más siendo mujer, pues, si el que se hubiese levantado del ataúd hubiera sido su marido, ¿habrían actuado igual la familia?
Gran relato con grandes implicaciones que os recomiendo abiertamente, tanto en libro como en versión sonora, medio por el cual la historia se hace todavía más amarga, si cabe.
Es uno de los mejores relatos de esta increíble autora. Buena elección, sí señor.
Un besote.
El final es desolador, todavía me estoy recuperando.
Un beso, Rocío.
Hola,
no he leído a la autora pero viendo el entusiasmo con el que escribes sobre este relato, no puedo más que llevármelo anotado.
Un beso, guapa
Te lo recomiendo sin reservas. Es muy corto, perfecto para conocer a la autora, y a todos los que lo leímos en la conjunta nos gustó, a pesa de la sensación de desolación que deja.
Ya me contarás si te animas 🙂
Un beso, Eyra.
Hola Anabel, como siempre ha sido un placer compartir lecturas junto a tu fuego. Este relato me ha encantado. Creo que me voy a leer más relatos góticos y de terror de la autora.
Un besazo enorme.
Lo mismo digo: me ha encantado y seguro que sigo con sus cuentos góticos, aunque tendrán que esperar un poquito.
Un beso, Nitocris, y muchas gracias por unirte y sentarte junto al fuego 🙂
Un beso.
Hola.
Sin duda al ser un relato no hay excusa para decir que no se tiene tiempo, me encantan estas mujeres que se adelantaron a su tiempo.
Muchos besos.
Te lo recomiendo, Rubí. Se lee en un momento y es muy intenso y triste. Ya me dirás si lo lees qué te pareció.
Un beso.
Hooolaaaa, Anabel.
Ya estoy por aquí de nuevo. Me fui unos días para desconectar y ya estoy operativa. Dices que este relato lo hay en versión sonora y me encantaría escucharlo. A ello voy…
Un besazo, ¡Muac!
¡Bienvenida de nuevo! Espero que hayas recargado las pilas y hayas disfrutado mucho del descanso 😉
Espero que te guste el relato, yo apostaría a que sí. En versión sonora, como mínimo está en el podcast de Noviembre nocturno.
Besazo, yo leo Novela.
Te diré que me has convencido. No he leído nada de la autora y ésta me parece un abuena manera de empezar.
Besos.
Nos gustó a todos lo que participamos en la lectura conjunta, así que te lo recomiendo sin reservas. Es impactante, y el final…
Un beso, Lady.
Hola!
Este me animé a leerlo por lo cortito que es y creo que ya mencionaste lo de que se podría considerar el primer cuento de zombis porque lo cierto es que me hice una idea bastante equivocada… para empezar, yo creía que Dorotea se despertaba después del entierro, no antes xD
Aún y así, me sorprendió la tristeza que evoca todo el relato, como realmente sientes la desesperación de Dorotea al verse repudiada por los demás 🙁
Gracias por proponerlo, de otra manera no creo que hubiera leído nunca a esta autora.
Un beso!
Hola, Lit:
A mí me tomó totalmente desprevenida el relato. No tenía ni idea de por dónde iba a ir y cuando llega el final me quedé… desesperada. Ciertamente, la tristeza que arrastra es inmensa.
Gracias a ti por unirte a la lectura y visitarme junto a la chimenea 🙂
Besos 🙂
Hola, pues in lugar a dudas me lo llevo apuntado, además al ser un relato corto me lo leeré en cuanto pueda hacerme con él.
Tengo muchas ganas de leerme cosas de esta autora 🙂
Hola, Cova:
El relato está libre de derechos de autor, por lo que es fácil de encontrar de forma gratuita por internet.
Espero que disfrutes de la lectura, que es, sin duda, impactante.
Un abrazo.
Otra de esas autoras que tengo pendientes, pero claro, es que son tantos los que deseo leer y adentrarme en su obra. Lo comparaste con Poe; espero que sea en contenido y no en forma, porque el estilo poético me echa un poco para atrás. Pero centrándome en el relato, tiene una pinta genial.
Un beso 😉
Se parecen algo en el estilo, pero sobre todo en la atmósfera. Puedes escucharlo en el podcast de Noviembre Nocturno (u otros podcast, creo que hay varios que lo narran) en algún rato que tengas y a ver qué te parece 😉
Besos, Rau.