Sin más dilación, os dejo mi aportación para el Reto 5 Líneas de Adella Brac de este mes, cuyas palabras obligatorias son confesiones, década y mismo.
Si algo he aprendido en la década que llevo siendo sacerdote es que las confesiones de los moribundos son siempre sinceras. Por eso arrastro a este niño hacia la pira con una mano, por eso sujeto un cirio con la otra. El abuelo, en su lecho de muerte, me reveló la identidad del pequeño: el Anticristo. No tiene marcas en la piel ni en el carácter, pero es lo mismo. Las últimas palabras son siempre sinceras.
¡Madre mía, qué fuerte! Me ha encantado…
Un besazo
Muchas gracias, Nitocris 🙂
Un beso.
¿Estás segura que los moribundos siempre dicen la verdad? Yo creo que algunos ni por esas. 😉
Me ha gustado mucho estas cinco líneas.
Un beso grande,
Jajaja Yo no lo sé, pero el sacerdote parece demasiado convencido 😀
Un beso, yo leo Novela, me alegra que te haya gustado el reto 🙂
Hola me ha encantado, un micro muy potente, saludos
Muchas gracias, Cecy 🙂
Un beso.
Pues anda que si al abuelo estaba equivocado… Qué bueno el micro!
Besotes!!!
Es que este sacerdote me parece que era un poco fanático… XD
Me alegro de que te haya gustado, Margari 🙂
¡Felicitaciones! Cuán breve y poderoso ha resultado tu micro, Anabel. Un sacerdote decidido y sin remordimientos, al parecer.
Saludos desde Chile.
Muchas gracias, Saricarmen, me alegro de que te haya gustado el micro.
Un saludo 🙂
Hola muy bueno el relato, son de esos que te dejan con mil preguntas.
Enhorabuena
Si en algún momento sigo la historia, espero responder alguna de esas preguntas 🙂
Un beso, No solo leo.
Lo leí por insta. Muy bueno. Pobre niño, el abuelo estaba ya senil, y tuvo que toparse con un clérigo fanático. Aunque… ¿hay alguno que no lo sea?
Un beso 😉
Me alegra que te haya gustado el micro, Ray 🙂
Un beso.
Hola.
Ya sabes que siempre me encantas, con tan pocas palabras haces sentir mucho.
Muchos abrazo.
Muchas gracias, Rubí. Me alegra mucho saber qué os gustan estos micros 🙂
Un beso.