Ya sabéis que la naturaleza es mi otra gran pasión, y que me gusta venir con alguna recomendación a este blog. Hoy os traigo dos muy diferentes, y os diría que no las dejéis pasar: el universo se hará mucho más grande.
Yo contengo multitudes (Ed Yong)
Cuando Whitman dijo «Yo contengo multitudes», creo que no fue consciente de toda la verdad que escondían sus palabras. Él, tú, yo, todos los seres, desde la secuoya más gigantesca hasta el más pequeño de los tardígrados albergamos dentro de nosotros, y sobre nosotros, una numerosa población de microorganismos con la que hemos establecido una estrecha relación a lo largo de los milenios.
Aunque la mayoría de los microorganismos son inocuos, para mucha gente se han convertido en sinónimo de enfermedad. Sin embargo, este libro hará que esa visión cambie, permitiéndonos descubrir cuán beneficiosos pueden ser. Lo primero que nos explica Ed Yong es que, en realidad, solo un pequeño porcentaje de bacterias son nocivas para nosotros. Más aun, pensar, como muchas veces hacemos, en clasificar a estos microorganismos como buenos o malos es pensar en términos infantiles: en la mayoría de las ocasiones las relaciones que establecemos (parasitismo, mutualismo, comensalismo) cambian con el tiempo. La simbiosis es una realidad en permanente conflicto.
Pero, como el autor nos advierte, hay un problema. En la actualidad, con nuestro estilo de vida, estas relaciones se están desestabilizando. Entender nuestra relación con el microbioma bacteriano solo atendiendo a sus aspectos negativos, a su posible patogenicidad, nos ha llevado a querer vivir en una burbuja de higiene artificial y malsana. A esto se unen otros problemas, como una generalizada dieta pobre en fibra y rica en cereales refinados (en vez de integrales) o una alta ingesta de antibióticos. Estas actitudes están cambiando nuestras multitudes, las están empobreciendo y, al disminuir el número de especies con las que establecemos relaciones beneficiosas, estamos perdiendo uno de nuestros principales y más naturales medios de protección para combatir posibles enfermedades, a la vez que originamos otras. Las relaciones simbióticas de los microbios con sus huéspedes que describe Ed Yong son asombrosas, así como las ventajas que ambos consiguen o pierden según su comportamiento.
Y es que esas relaciones son más importantes de lo que pueda parecer. El autor nos cuenta, de forma muy amena, un gran número de estudios que las vinculan con los problemas intestinales, el aumento de peso o, incluso, con nuestro comportamiento. ¿Libre albedrío? Habrá que preguntar a nuestras bacterias qué piensan.

Pero, aunque el libro se centra sobre todo en los microbios que tienen estrecha relación con los humanos, también explora otros ecosistemas. Lo asombroso es que muchas de esas otras poblaciones también están en crisis por culpa de nuestro estilo de vida. Así ocurre con las poblaciones microbianas del coral, que además de sufrir los efectos negativos del cambio climático sufren a consecuencia de otras alteraciones antropogénicas, como la existencia de hierro en las cercanías (pensemos en los navíos hundidos), lo que perturba la vida de las bacterias de los corales hasta tal punto que los conduce a la muerte.
El autor, tras una exposición fascinante (es uno de los mejores libros de divulgación científica que he leído en los últimos años), no solo nos enseña la gran abundancia de los microbios, sino que nos descubre que nos protegen de enfermedades, que ayudan a nuestro sistema inmunitario o que incluso afectan a nuestro comportamiento. Nos enseña a… quererlos. Cuando acabé la lectura, fui mucho más consciente del cuidado que necesitan mis bacterias, ahora hasta pienso en ellas cada vez que hago o como algo: ¿Eso les sentará bien o mal?
Una lectura que recomiendo a todo el mundo. Hacedme caso, no os arrepentiréis.

Zoópolis (Sue Donaldson-Will Kymlicka)
Una de mis editoriales preferidas es Errata Naturae. Gracias a ellos he podido leer este maravilloso ensayo.
En los últimos tiempos la Teoría de los Derechos de los Animales (TDA) parece haber sufrido un estancamiento. Con en este ensayo, los autores intentan vivificar la TDA con una revolucionaria visión en la que proponen traspasar el plano moral en nuestras relaciones con los animales no humanos y llegar hasta uno más político y social.
A partir de una ampliación de la teoría de la ciudadanía, Donaldsn y Kymlicka (ambos ligados al departamento de filosofía de la Universidad de Queen en Kingston) piden el reconocimiento de la ciudadanía para los animales domésticos, de la soberanía para los animales salvajes y de una cuasi-ciudadanía para los animales liminales.

El de las especies liminales es uno de los puntos más interesantes del libro, ya que toma en consideración nuestro comportamiento con aquellos animales que viven en estrecha relación con nosotros sin que los humanos lo hayamos querido de forma intencionada. Estas especies liminales no son domésticas ni salvajes, lo que las sitúa en un limbo que conduce a que, la mayoría de las veces sean consideradas plagas o invasoras, y, siendo despojadas de cualquier protección, acaben tratadas sin una mínima muestra de consideración ética. Entre estas especies se incluirían desde las palomas, gorriones, ciervos y zorros hasta las ratas o las cotorras argentinas. Para estos individuos liminales los autores proponen una teoría de cuasi ciudadanía, pero, puesto que ni en las sociedades humanas hay muchos ejemplos de ello (uno sería el de los amish), los autores admiten que esta es la propuesta más especulativa. Iniciativas como la siguiente me dan motivos para creer en la humanidad y en que, cuando quiere hacer algo, lo consigue:
A lo largo de la exposición, vemos que, aunque no lo hayamos percibido antes (lo cual es inexplicable), nuestras relaciones con los animales no se dan solo en el plano moral, sino también en el político y así debemos entenderlas y ponerlas en práctica. No es, pues, Zoópolis una refutación de la TDA, sino una ampliación que pone especial interés en solventar los puntos críticos en los que esta parece no funcionar.
Sé que este libro solo parecerá interesante a aquellas personas que ya lo están en la TDA, pero, si has llegado hasta aquí buscando una opinión sobre si merece la pena leerlo, mi respuesta es: no lo dudes.

Hola.
El que más me llama de los dos es Yo contengo multitudes, no para mí que no sé es interesante pero ya sabes que no es lo que suelo leer, pero a mi marido le encantan estas cosas, siempre está viendo documentales, así que sé que le gustaría los dos libros tan interesantes que nos traes y nos recomiendas.
Muchos besos.
Seguro que le gustará a tu marido. Y aunque no sea tu zona de confort, te animo a que le eches un vistazo. Ya verás cómo te engancha 😉
Un beso, Rubí.
Hola guapísima, pues los dos me parecen de lo más interesantes… Uno por conocer más del cuerpo humano y el otro para concienciar a la humanidad. Aunque como dices tú, solo lo acabaremos leyendo los que nos interesan los animales. Los tendré en cuenta.
Un besazo
El primero no se centra en el cuerpo humano como tal, solo en las bacterias, pero es muy muy interesante, te lo recomiendo.
El segundo sí, creo que solo lo leerán quienes ya estén interesadas en la TDA, pero en cualquier caso es un libro de filosofía y política con postulados muy fundamentados e interesantes.
Si te animas con alguno, no te olvides de contarme qué te parecieron 😉
Besos.
¡Hola, Anabel!
Son dos libros interesantísimos. No sabría por cual decantarme. Quizás eche un vistazo en la librería a los dos, si es que los tienen. Me suelen gustar mucho este tipo de libros. Así que… gracias por la recomendación.
Un besazo. ¡Muaca!
El primero te lo recomiendo abiertamente, es todo un descubrimiento, no dejes de leerlo. El segundo me ha dado una visión nueva de nuestras relaciones con los animales que me ha dejado totalmente revolucionaria al compartir muchos de sus postulados 🙂
Si les echas un vistazo, ya me dirás si te animas con alguno.
Un beso.
Los dibujos animados de «Érase una vez la vida» hicieron mucho daño a varias generaciones, pues nos creíamos que dentro del cuerpo convivían todos esos bichitos que iban montados en naves espaciales ???
Tonterías aparte, ambos libros me gustan bastante; para mí todos formamos un todo, los animales y las personas estamos en la misma línea, para mí no es más importante uno que otro, todos tenemos la misma importancia, creencia y palabras que muchas veces me acarrean problemas, pero me da exactamente igual, es lo que pienso. Como por ejemplo, si vas a hacer un medicamento o un cosmético para personas ¿porqué lo pruebas en animales? pruébalo en personas.
No me gustan los estereotipos ni etiquetar a las personas, por lo mismo tampoco lo hago con los animales, me parece igual de injusto decir «las palomas son sucias» que decir «todos los valencianos son unos mentirosos» (soy valenciana ?)
Lo dicho , me quedo ambos ???
Jajaja me encantaban esos dibujos, sin embargo los de Érase una vez el hombre no, ya se veía por donde iba a tirar jajajaja
Por lo que me cuentas, estoy segura de que van a ser dos lecturas que disfrutarás. Ya verás ;-9
Besos.
Pues la verdad es que ambos me parecen súper interesantes. Ya había leído alguno sobra la microbiota y me pareció todo un descubrimiento. Y el segundo me interesa como animalista que soy.
Un abrazo y gracias por las recomendaciones.
Entonces me atrevo a aventurar que te gustarán ambos libros 🙂 El primero es muy ameno y el segundo seguro que te interesará esa visión de las relaciones políticas y de ciudadanía con los animales no humanos.
Un abrazo.
Interesantes ambos son, pero sinceramente no creo que me anime. No es lo que suelo leer, aunque luego mi marido consigue engancharme a todos los documentales que ve de esta temática. Quizás a él sí pueda gustarle.
Besotes!!!
Si le recomiendas alguno, espero que le guste y que lo encuentre interesante 🙂
Besos, Margari.
Hola preciosa!
Yo no suelo leer este tipo de libros pero la verdad es que leyendo tu reseñas no me importaría darle una oportunidad, me gusta la naturaleza, es más yo vivo en el campo y adoro los largos paseos que hago de vez en cuando conectando con ella.
❀ Fantasy Violet ❀
Besotes! ??
Si al final te animas con alguno de los dos, espero que te resulten lecturas interesantes (creo que sí). Ya me contarás.
Un beso, Violeta.
Hola Anabel!! Unas novelas estupendas, me llevo bien anotadas tus recomendaciones. ¡Fenomenal post, como siempre! Besos!!
Espero que disfrutes mucho de las lecturas, pero recuerda que no son novelas, son libros de no ficción: el primero es divulgación científica y el segundo es un ensayo.
Si te animas con alguna, no te olvides de pasarte y contarme qué te parecieron 🙂
Besos.
Creo que Zoópolis es la opción que más podría gustarme. Creo que el mundo animal siempre tiene mucho por enseñarnos.
¡Muchos besos!
Totalmente de acuerdo, aunque en esa caso se centra más en nuestro comportamiento hacia el mundo animal no humano y cómo podemos mejorar nuestras relaciones morales, sociales y políticas con él. Si te animas con la lectura, espero que te resulte interesante. Ya me contarás 🙂
Besos.
¡Hola!
En este caso, los dos me parecen muy interesantes.
La verdad es que solo conocía el de Zoópolis porque sigo a la editorial en Instagram, y tenía mis dudas, pero, después de leerte, creo que me haré con él, aunque antes me quiero leer el de Thoreau XD
Ah, y en cuanto a lo de las leyes de protección animal, sí, se han estancado, para mí que queda mucho por hacer. Me parece que en tema de separación el animal doméstico todavía se considera un objeto más, ¿no? No sé, en general, la sociedad está más sensibilizada pero falta mucho.
Tampoco me quiero enrollar, pero es que el respeto es tan importante, no solo hacia las personas y lo animales, sino a la Tierra en sí, en fin, que me da mucha pena ver, por ejemplo, los parques de mi barrio otra vez llenitos de mierda como si la gente no hubiera aprendido nada de todo lo que ha pasado. Ya me estoy yendo por otros derroteros. No te aburro más jajja
¡Un saludo!
Hola, Reich:
Creo que ambos libros te gustarán mucho. El planteamiento de Zoópolis es muy interesante y por ejemplo, respecto a la reclamanción de la ciudadanía para los animales domésticos, hace reflexionar a la sociedad de cómo muchas prohibiciones (por ejemplo, impedirles entrar en restaurantes) no son más que excusas para no considerarlos nuestros iguales. Y el de Ed Yong también te va a gustar. Creo que no me equivoco al recomendártelos. Ya me dirás si me equivoco 😉
Beso grande.
Aunque los dos me parecen la mar de interesantes, el de las bacterias me quiere sonar más, por documentales y artículos científicos que leí hace tiempo, que ponen de manifiesto el peligro de los productos químicos artificiales que nos debilitan contra enfermedades, frente a los beneficios de esa flora bacteriana que todos tenemos (una realidad que, en según qué círculos, no puedes contar así como así porque te miran como si te faltara un tornillo). El segundo, el de los animales, es quizá el que más me llame, por lo menos para conocer nuevos puntos de vista, alternativas al sistema actual tal como está regido el mundo (me ha encantado lo del rascacielos construido para albergar a distintas especies de animales. Qué maravilla). ^^
Un beso 😉
Por lo que comentas creo que te gustarían los dos; el de los microorganismos descubre muchos estudios que creo bastante desconocidos, échale un vistazo antes de descartarlo.
Ojalá nuevas visiones, como la de ese concurso, lleguen a nuestras latitudes y tengamos pronto nuestro propio rascacielos 🙂
Besos, RAy.
Hola Anabel!! Me has picado mucho la curiosidad por estos dos títulos, algunos los conocía y otros no, así que tomo buena nota de tus impresiones. ¡Genial post! Besos!!
Me encanta haberte picado. Espero que te animes y los disfrutes 🙂
Un beso.
Hola!
Te digo lo de siempre, estos temas me parecen muy interesantes cuando me los explicas, pero sé que no sería capaz de leer ninguno de los libros… pero me alegra que los hayas disfrutado tanto ^^
Un beso!
Son los dos muy interesantes, pero sobre todo el primero, creo que te sorprendería y te gustaría mucho… (sí, soy mala, yo aquí queriendo aumentar tu lista de pendientes jejeje)
Un beso.